30 De Abril de 2024
San Indalecio
Mártir - Siglo I
Historias
de Almería · Nacido en Caspe, fue uno de los siete Varones
Evangélicos que acompañaron a Santiago en la difusión del
cristianismo en la Hispania romana
Víctor J. Hernández
Bru
EL 15 de mayo se celebra la festividad de San Indalecio,
patrón de Almería. No es una festividad que los almerienses,
celebren con gran entrega, y es más, una parte importante de la
ciudadanía ignora la circunstancia de este patronazgo. Pero, ¿quién
fue San Indalecio, y por qué es el patrón de la provincia?.
San
Indalecio, fue uno de los siete Varones Apostólicos, que llegaron
hasta la península ibérica romana, en el Siglo I después de
Cristo, para anunciar el Evangelio, todos ellos bajo la coordinación
del apóstol Santiago, que sería su guía en la labor
evangelizadora.
Nacido en la localidad aragonesa de Caspe,
Indalecio conoció en Zaragoza, al apóstol Santiago, y colaboró con
él en la construcción del camarín de la Virgen del Pilar.
No
fue el único que ayudó a Santiago, a proclamar la fe en aquella
Hispania romana.
Fueron un grupo de discípulos del Apóstol,
cuya área de influencia de apostolado, fue toda la península,
conformando con él, un grupo que recorrió y se distribuyó por
diferentes territorios hispánicos, para continuar la labor de
proclamación del Evangelio, con grandes dificultades.
De
hecho, tras convivir con él en Zaragoza, fueron ordenados obispos en
Roma, por parte de San Pedro y San Pablo, cabezas de la primitiva
Iglesia, adonde viajaron acompañando al Apóstol 'español'.
Con
él también conocieron Jerusalén, en un viaje absolutamente clave
en sus vidas, justo antes de regresar a Hispania, para predicar la fe
del cristianismo, y entregar su vida a tal misión, bajo la
influencia del Apóstol.
De esta manera, San Torcuato se
estableció en Guadix, entonces la ciudad denominada Acci; San
Tesifón se estableció en la Verji hoy conocida como Berja; San
Esiquio fue a Carcese, ubicada en la actual provincia de Jaén; San
Segundo se estableció en Abla, entonces denominada Abula; San
Eufrasio en Iliturgi, que actualmente es la ciudad jienense de
Andújar; San Cecilio fue a parar a Elvira, en territorio granadino;
y finalmente, San Indalecio se estableció en la ciudad de Urci, en
Almería, donde comenzó su labor.
No fue fácil su camino
hasta llegar a Urci, teniendo incluso que salvar persecuciones, que
en aquellos tiempos sufrían los cristianos, por parte del Imperio.
Urci era un antiguo asentamiento íbero, de la que hablan algunos
estudiosos romanos, como Plinio El Viejo, que la cita como ciudad
lindera, entre la provincia Bética y la Tarraconense.
Tras
asentarse en la localidad de Urci, ubicada en el área del Bajo
Andarax, se trasladó a la actual capital de Almería, donde se
convirtió, para la historia, en el antecedente de los obispos de
esta diócesis.
No fue ésta su última plaza, puesto que
posteriormente pasó por otras como Granada, Cartagena, Lorca,
Murcia, Elche, Orihuela, Alicante, Valencia, Alcañiz, Segorbe,
Tarazona, Zaragoza, Oca, Burgos y Toledo.
Su labor de
apostolado, no se limitó a toda la cuenta hispánica mediterránea,
sino que se amplió por territorios del interior, en una labor
abnegada, que le supuso no pocas persecuciones y acosos.
De
hecho, su muerte está registrada como un martirio, antes de ser
arrojado al mar, para ser enterrado en Urci.
Sus restos
mortales, precisamente, han sufrido no pocas vicisitudes desde
entonces. Por ejemplo, tras la dominación musulmana, el capitán
mozárabe García Arnáez lo hizo trasladar al Monasterio pirenaico
de San Juan de la Peña, ayudado por monjes benedictinos, en el siglo
XI.
La ubicación de dicho monasterio en la Ruca Jacobea,
volvía a poner en relación a San Indalecio y al Apóstol Santiago.
Sin embargo, ésta no sería la morada definitiva de los restos del
patrón almeriense. Con la desamortización del siglo XIX en España,
se volvían a trasladar dichos restos, en este caso hasta la Catedral
de Jaca.
Hoy por hoy, San Indalecio descansa bajo el altar
mayor de la Catedral de Almería, gracias a una gestión del anterior
obispo de la diócesis, Rosendo Álvarez Gastón.
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