Sábado 14 de mayo
San
Matías
Apóstol
+64
Fue
elegido por los apóstoles para ocupar el puesto de Judas, como
testigo de la resurrección del Señor. Así lo atestiguan los Hechos
de los apóstoles (Hch 1,15-26)
Siguió
a Jesús "desde que este fue bautizado hasta su ascensión".
Por este motivo, cuando Judas Iscariote desertó y hubo necesidad de
completar el número de los doce Apóstoles,
Pedro
lo propuso para que se uniera al grupo apostólico y "se
convirtiera en testigo de la resurrección" del Señor. (Cf.
Hechos 1, 15-26)
"(Matías),
después de Pascua, fue elegido en lugar del traidor. En la Iglesia
de Jerusalén se presentaron dos a la comunidad, y después sus
nombres fueron echados a suerte: « José, llamado Barsabás, por
sobrenombre Justo, y Matías» (Hechos l, 23). De este modo
«fue agregado al número de los doce apóstoles» (Hechos 1, 26).
No
sabemos nada más de él, a excepción de que fue testigo de la vida
pública de Jesús (Cf. Hechos 1, 21-22) siéndole fiel hasta el
final.
"Sacamos
de aquí una última lección: si bien en la Iglesia no faltan
cristianos indignos y traidores, a cada uno de nosotros nos
corresponde contrabalancear el mal que ellos realizan con nuestro
testimonio limpio de Jesucristo, nuestro Señor y Salvador".
-Benedicto XVI, 18 X 2006
Sus
reliquias están en Tréveris (Alemania), ciudad de la que es
patrono.
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Oficio
de lectura, 14 de Mayo,
San Matías, Apóstol
San Matías, Apóstol
Muéstranos,
Señor, a cuál has elegido
De
las homilías de san Juan Crisóstomo, obispo, sobre el libro de los
Hechos de los apóstoles
Uno
de aquellos días, Pedro se puso en pie en medio de los hermanos y
dijo. Pedro, a quien se había encomendado el rebaño de Cristo, es
el primero en hablar, llevado de su fervor y de su primacía dentro
del grupo: Hermanos, tenemos que elegir de
entre nosotros. Acepta el parecer de los reunidos, y al
mismo tiempo honra a los que son elegidos, e impide la envidia que se
podía insinuar.
¿No
tenía Pedro facultad para elegir a quienes quisiera?. La tenía, sin
duda, pero se abstiene de usarla, para no dar la impresión de que
obra por favoritismo. Por otra parte, Pedro aún no había recibido
el Espíritu Santo. Propusieron –dice el texto sagrado– dos
nombres: José, apellidado Barsabá, de sobrenombre Justo, y Matías.
No es Pedro quien propone los candidatos,
sino todos los asistentes. Lo que sí hace Pedro es
recordar la profecía, dando a entender que la elección no es cosa
suya. Su oficio es el de intérprete, no el
de quien impone un precepto.
Hace
falta, por tanto, a uno de los que nos acompañaron. Fijaos qué
interés tiene en que los candidatos sean testigos oculares, aunque
aún no hubiera venido el Espíritu.
Uno
de los que nos acompañaron –precisa– mientras convivió con
nosotros el Señor Jesús. Se refiere a los que han
convivido con él, y no a los que sólo han sido discípulos suyos.
Es sabido, en efecto, que eran muchos los que lo seguían desde el
principio. Y, así, vemos que dice el Evangelio: Era uno de los dos
que oyeron a Juan y siguieron a Jesús.
Y
prosigue: Mientras convivió con nosotros el Señor Jesús, desde que
Juan bautizaba. Con razón señala este punto de partida, ya que los
hechos anteriores nadie los conocía por experiencia, sino que los
enseñó el Espíritu Santo.
Luego
continúa diciendo: Hasta el día de su ascensión, y como testigo de
la resurrección de Jesús. No dice: «Testigo de las demás cosas»,
sino: Testigo de la resurrección de Jesús.
Pues merecía mayor fe quien podía decir: «El que comía, bebía y
fue crucificado, este mismo ha resucitado».
No
era necesario ser testigo del período anterior ni del siguiente, ni
de los milagros, sino sólo de la resurrección. Pues
aquellos otros hechos habían sido públicos y manifiestos, en
cambio, la resurrección se había verificado en secreto y sólo
estos testigos la conocían.
Todos
rezan, diciendo: Señor, tú penetras el corazón de todos,
muéstranos. «Tú, no nosotros». Llaman con razón al que penetra
todos los corazones, pues él solo era quien había de hacer la
elección. Le exponen su petición: con toda confianza, dada la
necesidad de la elección.
No
dicen: «Elige», sino muéstranos a cuál has elegido, pues saben
que todo ha sido prefijado por Dios. Echaron suertes. No se creían
dignos de hacer por sí mismos la elección, y por eso prefieren
atenerse a una señal.
Oración: Oh Dios, que quisiste incorporar a San Matías al colegio de los apóstoles, concédenos, por sus méritos e intercesión, ser testigos de tu resurrección, sabiendo trabajar por tu Reino con Paciencia, Amor y Misericordia. A Tí Señor, que dijiste que dichosos serán los que sin ver hayan creído en Tí. Amén.
Oración: Oh Dios, que quisiste incorporar a San Matías al colegio de los apóstoles, concédenos, por sus méritos e intercesión, ser testigos de tu resurrección, sabiendo trabajar por tu Reino con Paciencia, Amor y Misericordia. A Tí Señor, que dijiste que dichosos serán los que sin ver hayan creído en Tí. Amén.
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