viernes, 24 de junio de 2016

Sexta Feria, 24 de junio

LA NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA


San Juan Bautista Niño - Pintura de Murillo

La voz del que clama en el desierto

Precursor del nacimiento y de la muerte de Cristo

Martirio de San Juan: 29 de agosto
Hijo de Zacarías e Isabel, pariente de la Virgen María, es el precursor de Jesucristo. En esta misión se entrega totalmente viviendo en penitencia, austeridad, y celo por las almas.

Bautizó a Jesús en el Jordán.  Es el último y mas grande de los profetas del Antiguo Testamento, ya que es puente con en el Nuevo Testamento. Mártir.

  Antes de la venida de Jesús, Juan proclamaba un bautismo de arrepentimiento [Hechos 13:24]. Juan fue enviado a cumplir la profecía de Malaquías [Mal. 3:1; Lk. 1:76; Also Lk. 3:15-8; Mk. 1:4; Acts 19:4]

La humildad de Juan hizo posible que Dios hiciera grandes cosas por medio de él, Cf.  Hechos 13:25.

"Conviene que Él (Jesús) crezca, y que yo disminuya" -San Juan Bautista.

San Juan, Precursor, Profeta y Bautista  -

Leemos en el Catecismo:

717 "Hubo un hombre, enviado por Dios, que se llamaba Juan. (Jn 1, 6). Juan fue "lleno del Espíritu Santo ya desde el seno de su madre" (Lc 1, 15. 41) por obra del mismo Cristo que la Virgen María acababa de concebir del Espíritu Santo. La "visitación" de María a Isabel se convirtió así en "visita de Dios a su pueblo" (Lc 1, 68).

718 Juan es "Elías que debe venir" (Mt 17, 10-13): El fuego del Espíritu lo habita y le hace correr delante [como "precursor"] del Señor que viene. En Juan el Precursor, el Espíritu Santo culmina la obra de "preparar al Señor un pueblo bien dispuesto" (Lc 1, 17).

719 Juan es "más que un profeta" (Lc 7, 26). En él, el Espíritu Santo consuma el "hablar por los profetas". Juan termina el ciclo de los profetas inaugurado por Elías (cf. Mt 11, 13-14). Anuncia la inminencia de la consolación de Israel, es la "voz" del Consolador que llega (Jn 1, 23; cf. Is 40, 1-3). Como lo hará el Espíritu de Verdad, "vino como testigo para dar testimonio de la luz" (Jn 1, 7;cf. Jn 15, 26; 5, 33). Con respecto a Juan, el Espíritu colma así las "indagaciones de los profetas" y la ansiedad de los ángeles (1 P 1, 10-12): "Aquél sobre quien veas que baja el Espíritu y se queda sobre él, ése es el que bautiza con el Espíritu Santo ... Y yo lo he visto y doy testimonio de que este es el Hijo de Dios ... He ahí el Cordero de Dios" (Jn 1, 33-36).

720 En fin, con Juan Bautista, el Espíritu Santo, inaugura, prefigurándolo, lo que realizará con y en Cristo: volver a dar al hombre la "semejanza" divina. El bautismo de Juan era para el arrepentimiento, el del agua y del Espíritu será un nuevo nacimiento (cf. Jn 3, 5).

---------------------------------------
Hoy renovemos juntos nuestras promesas bautismales con fervor:

¿Renunciamos a Satanás, esto es:
al pecado, como negación de Dios;
al mal, como signo del pecado en el mundo;
al error, como ofuscación de la verdad;
a la violencia, como contraria a la caridad;
al egoísmo, como falta de testimonio del amor?

R/. ¡Sí, renunciamos!.

¿Renunciamos a sus obras, que son:
sus envidias y odios;
sus perezas e indiferencias;
sus cobardías y complejos;
sus tristezas y desconfianzas;
sus materialismos y sensualidades;
sus injusticias y favoritismos;
sus faltas de fe, de esperanza y de caridad?

R/. ¡Sí, renunciamos!.

¿Renunciamos a todas sus seducciones, como pueden ser:
el creerse superiores;
el estar muy seguros de vosotros mismos;
el creer que ya están convertidos del todo?

R/. ¡Sí, renunciamos!.

¿Renunciamos a los criterios y comportamientos materialistas que consideran:
el dinero como la aspiración suprema de la vida;
el placer ante todo;
el negocio como valor absoluto;
el propio bien por encima del bien común?

R/. ¡Sí, renunciamos!.

¿Creemos en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra?

R/. ¡Sí, creemos!.

¿Creemos en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que nació de Santa María Virgen, murió, fue sepultado, resucitó de entre los muertos y está sentado a la derecha del Padre?

R/. ¡Sí, creemos!.

¿Creemos en el Espíritu Santo, en la Santa Iglesia Católica, en la comunión de los Santos, en el perdón de los pecados, en la resurrección de los muertos y en la vida eterna?

R/. ¡Sí, creemos!.

Ésta es nuestra fe, ésta es la fe de la Iglesia, la que nos gloriamos de profesar en Jesucristo nuestro Señor.

R/. ¡Amén!.

Oración Final: Dios Todopoderoso y Eterno, que cuando éramos niños e hicimos la primera afirmación consciente de las promesas bautismales, dadas en primera instancia por nuestros padres y padrinos, pensábamos que era sencillo cumplirlas, pero ahora sabemos por la experiencia de vida, que ellas nos llevan inexorablemente a la exclusión en muchos ámbitos sociales y laborables, y hasta nuestro linchamiento social, abierto o solapado, incluso dentro de la propia Iglesia, y que hasta puede concluir con nuestro martirio si ocupamos cargos públicos o privados de relevancia, dános las fuerzas de tu Espíritu Santo para reafirmarlas una y otra vez con vuestra Fortaleza, Ciencia y Consejo todos los días de nuestra Vida. A Tí Señor, que se abrieron los Cielos en tu Bautismo, ábrenos el Camino de nuestra Iluminación y Purificación Interior. Amén.


No hay comentarios:

Publicar un comentario